Su extraordinaria presencia y elegancia siempre han atraído la atención. Después de su primer matrimonio, se casó con Jim Lemley y se convirtió en madre de una hija.

Sophie misma atribuye su apariencia juvenil a cosas simples: una dieta saludable, suficiente sueño y, sobre todo, una sonrisa cálida. Sin embargo, su verdadero secreto radica en su actitud hacia el envejecimiento.
