En el mundo moderno, criar a los hijos conlleva su propio conjunto de dificultades. Además de lidiar con los comentarios de los miembros de la familia, los padres jóvenes a menudo tienen que enfrentar las críticas de extraños que nunca han conocido sobre su estilo de crianza en internet. Puede ser, para decirlo suavemente, abrumador.
La historia de Jordan: Cuidando a los quintillizos
Conoce a Jordan Driskell, un padre de 31 años de cinco quintillizos que actualmente tienen cinco años. ¡Imagina la aventura de cuidar a cinco niños de la misma edad! Mantener un ojo en los más pequeños puede ser un desafío durante esta etapa de su desarrollo, ya que son curiosos y sociables.
Jordan tomó la decisión creativa después de darse cuenta de que se necesitaba una solución. Para ayudarle a manejar a sus bulliciosos pequeños mientras están juntos en público, compró correas diseñadas especialmente para niños.
Una opción viable para una familia numerosa
Para adaptarse a su gran familia, anteriormente usaban un carrito de seis asientos. Los niños se ponían inquietos mientras estaban confinados en él, por lo que esto resultaba tedioso. Además, el carrito era pesado y difícil de transportar a cualquier lugar.
Ahora, gracias a las correas, los niños pueden explorar su entorno libremente mientras Jordan los vigila. Con estas correas, la familia puede salir de manera sensata sin que él pierda de vista o control sobre los quintillizos. ¡En esta situación, todos ganan!
La represalia: conceptos erróneos y evaluaciones
Jordan acaba de subir un video de la excursión familiar al acuario y, de manera inesperada, recibió muchos comentarios críticos. Con más de 3 millones de vistas, el video de los niños con correas se volvió viral. No es sorprendente que esto generara cientos de comentarios condenando a los padres y afirmando que los niños no deberían estar atados porque no son animales.
Al algunos comentarios llegaron a sugerir que tal vez tener menos hijos es la solución si el estrés de criar a tantos niños es demasiado. Otros expresaron su desprecio bajo el pretexto de dar consejos, sugiriendo que los padres deberían ser mejores a la hora de educar a sus hijos y enseñarles los peligros de alejarse.
Opiniones de expertos: compreniendo las ventajas
Sin embargo, no todos los expertos están de acuerdo con esta reacción. La experta en crianza y desarrollo adolescente, la Dra. Deborah Gilboa, presenta un punto de vista alternativo. Ella cree que un niño no se siente como un animal cuando lleva una correa. De hecho, las correas ofrecen una opción mucho mejor que no salir al exterior en absoluto.
“Las correas pueden ser una gran ayuda para niños más pequeños o neurodiversos para mantenerse seguros en entornos públicos”, dice la Dra. Gilboa. Sin embargo, advierte que puede ser más problemático si las habilidades de escucha de un niño neurotípico no se han desarrollado para cuando tienen ocho o nueve años. En ese momento, los padres deberían ser capaces de comunicarse verbalmente con sus hijos y no necesitar tantos dispositivos como las correas.